Las bajas temperaturas pueden afectar negativamente a nuestra salud. El frío, la humedad, las heladas, la nieve y los cambios de temperatura pueden poner a prueba nuestro sistema inmunológico. Resfriados, gripe, tos, dolor de garganta, moqueo, malestar general…
Es el momento de reforzar nuestras defensas para protegernos de las infecciones más típicas del invierno: gripes, catarros y los síntomas que los acompañan. ¿Sabes que vitaminas son imprescindibles para fortalecer tu sistema inmunológico en esta época del año? ¡Toma nota!
Una alimentación sana y equilibrada proporciona multitud de nutrientes necesarios para nuestro organismo. Para prevenir resfriados, catarros, gripes y otras infecciones, destaca sobre todo el efecto de las siguientes vitaminas y minerales:
• Vitamina C. Es un potente antioxidante que ayuda a prevenir resfriados. Además, regula el sistema inmune. Por otro lado, la ingesta de vitamina nos ayuda a expulsar mucosidad y facilita la recuperación.
• Vitamina A. La carencia en esta vitamina entre otros problemas está relacionada con la propensión a las infecciones en las vías respiratorias. Los cilios de las mucosas de la nariz y pulmones se vuelvan inmóviles. Esta reducción en el movimiento provoca que los gérmenes intrusos y otras sustancias nocivas permanezcan más tiempo en el tracto respiratorio produciendo enfermedad. Además, la mucosidad se vuelve más densa siendo un caldo de cultivo perfecto para los patógenos.
• Vitamina E. Contribuye al correcto funcionamiento del sistema inmune y posee un elevado poder antioxidante
• Vitamina D. Ayuda a la absorción del calcio en los huesos y también es crucial para el sistema inmune, muscular y nervioso.
• Selenio. Nos protege contra infecciones y el daño causado por los radicales libres.
• Zinc. Entre otras muchas funciones, participa en la diferenciación celular y síntesis del ADN, protege a las células del daño oxidativo y contribuye a la función normal del sistema inmunitario.