Los retinoides cumplen funciones esenciales en nuestro organismo, en la visión, en la diferenciación celular, el crecimiento óseo y la inmunidad. No obstante, su uso se ha generalizado especialmente respecto al cuidado de la piel, como tratamiento de arrugas, manchas e hiperpigmentaciones o de acné.
Los retinoides comprenden una serie de sustancias, naturales o sintéticas, derivadas de la vitamina A. Como tales, se les consideran antioxidantes, compuestos químicos inestables que neutralizan los radicales libres que se producen en la piel a causa de la exposición solar y que dañan los diferentes componentes celulares.
• La vitamina A no puede ser sintetizada por el organismo humano, por lo que debe obtenerse de una fuente externa, ya seo oral o tópica.
• Los retinoides llevan a cabo múltiples funciones. Entre ellas se encuentran las siguientes:
• Modular la queratinización: contribuye a que no altere el proceso natural por el que las células muertes se desprenden de la piel.
• Acción antiinflamatoria
• Inhibir la producción de colagenasa por los fibroblastos
• Aumentar la síntesis de colágeno
• Disminuir la secreción de sebo: reduce el tamaño de la glándula sebácea y en consecuencia, la producción de sebo.
• Modular la inmunidad
Principales formas del retinol
Podemos encontrar retinoides de primera, segunda, tercera y cuarta generación. Los más utilizados son:
Presenta menor potencial de irritación, pero mantiene su eficacia. Es uno de los más utilizados en las formulaciones cosméticas. Se convierte en ácido retinoico al entrar en contacto con la piel.
Tretinoína. Forma ácida de la vitamina A. Actúa reduciendo la activación de las metaloproteinasas, enzimas que degradan el colágeno.
Retinoide tópico con efectos similares a la Tretinoína.
Isotretinoína. Actúa reduciendo el aspecto de las arrugas.
Pros y contras
-Ayuda a promocionar la síntesis de colágeno.
-Mejora la textura de la piel logrando que se vea más fina y suave.
-Gracias al a exfoliación que realiza la piel logra verse más luminosa.
-Tiene una gran capacidad para favorecer la renovación celular.
-Los poros se ven más pequeños.
-Aumenta la producción de colágeno por lo que mejora la flacidez.
-Las arrugas se difuminan, ya sean finas o profundas.
-Mejora la hidratación de la piel.
Efectos secundarios
Puede que con el uso del retinol la piel se irrite un poco, pero no hay que preocuparse ya que es bastante normal, sentir la piel más tirante o seca entra dentro de lo esperado mientras la piel se va adaptando. Pero si la piel se enrojece mucho, se descama o se tiene la sensación de un quemazón muy intensa entonces es mejor parar. Lo más probable es que la piel no lo tolere, incluso en las concentraciones más bajas, en este caso es mucho mejor evitarlo, ya que los efectos secundarios serán mayores que los beneficios.
Las pieles sensibles, intolerantes o con problemas como el eczema, la rosácea o la cuperosis, deben tantear otras opciones más delicadas con su tipo de piel.
Un consejo: si tras las primeras aplicaciones aparece sensación incómoda en la piel, hay que espaciar las aplicaciones hasta que la piel se habitúe. Hay que evitar el contacto con los ojos y, a menos que el envase diga lo contrario, llevarlo siempre con protección alta encima si se va a salir a la calle.